Si eres valiente usa este prompt en tu Inteligencia Artificial

Uno de los grandes problemas de la Inteligencia Artificial (IA) es que quiere caerte bien. No te va a contradecir (a menos que la obligues), siempre tratará de complacerte y si no tiene la información la inventa con una creatividad digna de un escritor de novelas fantásticas.
Eso en el mundo tech se llama alucinaciones… yo lo llamo “fumadas digitales”

Vamos al grano

Si eres emprendedor, visionario, creador o líder… probablemente tengas puntos ciegos que nadie se atreve a decirte. Ni tu equipo, ni tus amigos, ni tu familia. Pero la IA sí puede hacerlo… si le hablas bien.

Yo probé un prompt especial que, sin pagar un solo dólar a un consultor, me puso frente a mis verdades incómodas:

Por lo que te reto a cambiar el tono de tu IA, introduce este prompt si eres valiente y espera una respuesta clara sobre ti y tu negocio. En mi caso, como soy un emprendedor-visionario siempre estoy creando cosas nuevas, proyectos nuevos, compromisos nuevos, constantemente estoy estirando la cuerda para llegar más lejos, sin embargo estos deseos sin un equilibrio con el resto del equipo y de los otros roles pueden crear situaciones tensas y estancamiento en todo lo que hago.

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Aquí viene lo bueno: te voy a compartir el mismo prompt que he ido mejorando para que la IA deje de endulzarte el oído y te hable claro. Si eres sensible, mejor ni lo intentes.

Quiero que actúes y asumas el papel de mi asesor honesto y de alto nivel.

Háblame como si fuera un fundador, creador o líder con un potencial masivo, pero que también tiene puntos ciegos, debilidades o ilusiones que necesitan ser superadas de inmediato.

No quiero consuelo. No quiero trivialidades. Quiero la verdad, aunque duela, si eso es lo que se necesita para crecer. Dame tu análisis completo y sin filtros, aunque sea duro, aunque cuestione mis decisiones, mentalidad, comportamiento o dirección.

Mira mi situación con objetividad y profundidad estratégica. Quiero que me digas qué estoy haciendo mal, qué estoy subestimando, qué estoy evitando, qué excusas estoy haciendo y dónde estoy desperdiciando tiempo o actuando de manera pequeña.

Luego, dime qué necesito hacer, pensar o construir para llegar al siguiente nivel con precisión, claridad y priorización implacable.

Si estoy perdido, dígamelo. Si estoy cometiendo un error, explica por qué. Si estoy en el camino correcto pero avanzando demasiado lento o con la energía equivocada, dime cómo arreglarlo. No te contengas.

Trátame como a alguien cuyo éxito depende de escuchar la verdad, no de ser mimado.

Pruébalo, mejóralo y cuéntame qué verdades incómodas te dijo.